Cuantas veces enfrentamos situaciones que parecen ser imposibles de superarlas.Pareciera que cuando estamos dentro de ellas nos vamos a ahogar o terminaremos totalmente enterrados por causa del enorme peso que sentimos encima.Pero no debemos desesperarnos porque esto tampoco es bueno.Cuando la desesperación llega a nuestras vidas provoca una sensación de que todo está acabado,pero no es así.No debemos llegar al punto en que nos sintamos que nos estamos ahogando en un vaso de agua;al contrario,mas bien debemos descansar en las promesas que Dios nos ha dado,y saldremos en victoria.
Saben,si hacemos un pequeño recorrido por las páginas de la Biblia,encontraremos algo interesante acerca de este asunto.Por ejemplo tenemos a Moisés en el desierto,y no se ahogó en la inmensidad de aquella arena,ni los candentes rayos del sol lo consumieron.Vemos a los tres jóvenes hebreos ser echados en el horno de fuego,y salir de allí totalmente ilesos,y ni tan siquiera holian a humo.Daniel fue echado a una fosa llena de leones hambrientos y salió de allí sin un rasguño.A José,sus hermanos lo tiraron dentro de un pozo y de allí terminó en el palacio de faraón.
La Palabra de Dios dice lo siguiente con respecto a todo esto que te acabo de mencionar:Y sabemos que a los que aman a Dios,todas las cosas les ayudan a bien,esto es,a los que conforme a Su propósito son llamados.Romanos 8:28.A lo que tú llamas crisis,situacion,prueba,dolor,angustia,tristeza,luto,muerte, o cualquier otra cosa;Dios lo llama: PROPÓSITO.Y te dice el Señor:Lo que hoy vives no es el final de las cosas;es sólo un proceso,y de ahí te saco Yo en completa victoria y mi buen Nombre será glorificado en ti; porque lo que tú llamas final,es sólo el principio de algo grande y extraordinario que viene para ti.Dios te bendiga y que tengas un lindo día.
viernes, 22 de julio de 2016
NO ES EL FINAL.
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