lunes, 11 de abril de 2016

SOLO TIENES QUE TOCAR SU MANTO.

      Uno de los pasajes bíblicos que más me impactan y tocan mi vida es el relato de la mujer con el flujo de sangre(Lucas 8:43-48).Se dice de esta mujer que estaba muy enferma.Que había ido a todos los médicos de su época;que había gastado todo sus ahorros en ellos,y que no pudo ser curada.Doce años...doce largos años con un flujo de sangre.Su condición actual era peor que al inicio de su enfermedad. Hasta por las leyes establecidas de su época era considerada una mujer inmunda.Le estoy hablando a alguien en esta hora?
      Pero en este relato hay algo interesante. Ella oyó hablar de Jesús. Y es esto lo que cambia por completo cualquier panorama incierto de tu vida, y cualquier pronóstico médico u otra cosa que te esté afectando en todas las áreas de tu ser.Porque cuando tu oyes el mensaje de la Cruz, el mensaje acerca de Jesús, se produce en ti la fe y la esperanza necesaria para alcanzar el milagro que tanto necesitas.
      Aquella mujer salió corriendo en busca de Jesús, sin importarle su condición y sus limitaciones. Y al verle,una inmensa multitud le rodeaba.Pero ella estaba dispuesta a todo.Y entre la multitud estaba la Sra.Duda y la Sra.Burla,Pero ella le dijo:"Con permiso a un lado que voy en busca de mi milagro ".También le dijo lo mismo al Sr.Incrédulo y al Sr.Desesperación. Empujó hacia el lado a la Sra.Tormenta y a la Sra.Aflicción. Y poco a poco fue adentrándose entre la multitud hasta que tocó el borde del manto de Jesús, porque se decía a si misma,:" Si tocare el borde de su manto seré sana".Wao...
     Amado@s, yo no sé cuál es el milagro que esperas recibir en este día para tu vida. Pero si has oído hablar de Jesús, de seguro que lo puedes recibir. Sólo has lo que hizo esta mujer. Lanzate entre la multitud y en un acto de fe atrevete a tocar el borde de Su manto;estoy seguro que algo grande sucederá en tu vida. Dios te bendiga.

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