Cuando estamos buscando continuamente la presencia de Dios, una paz profunda invade nuestras almas.Sentimos en lo más profundo de nuestros corazones esa indescriptible paz que la Biblia señala acerca de ella que sobrepasa todo entendimiento humano. Es esa paz que cuando miramos a nuestro alrededor podemos notar que existe una perfecta armonía entre lo celestial y lo terrenal.Una perfecta armonía que solo se puede encontrar cuando Dios es el centro de todo;cuando Dios se convierte en el destino de todos.
Es por eso que cuando decidimos movernos y echamos nuestra barca a navegar, el horizonte nos señala que todo está a nuestro favor.Por todos lados veremos como las cosas se acomodan de tal manera, que tendremos un viaje cómodo,tranquilo y ameno.Todo por que Dios es quien nos da la paz que necesitamos, porque Él es la Paz.Así que ese viaje que tienes en mente realizar, esa aventura que anhelas llevar a cabo, y ese sueño por alcanzar...ya es hora que lo logres;el destino no puede esperar.Dios te bendiga.
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