El peso que muchas veces llevamos en nuestros hombros es mucho más de lo que podemos soportar.De pronto nos encontramos sumergidos en un mar de incertidumbre y de muchas preguntas.Y mientras nos pasemos buscando la solución a nuestros problemas por cuenta propia,veremos como nuestra vida va desfilando por un despeñadero a gran velocidad.
Cuando nos encontremos atravesando por momentos como estos,debemos acercarnos a Dios y depositar nuestra fe en Él.Por medio de Su Palabra el Señor Jesús nos dice lo siguiente:"No os hagais,pues,semejantes a ellos;porque vuestro Padre sabe de qué cosas teneis necesidad,antes que vosotros le pidais"(Mateo 6:8).
Si andamos preocupados por todo lo que nos pasa,solo estaremos prestandole nuestra atención y haciendo más grande el asunto de lo que pueda ser.Pero creer en las promesas de Dios que encontramos en Su Palabra nos dará una victoria segura y una profunda paz sobre cualquier situación.Cuando hacemos esto,le estamos diciendo a Dios que obre en nosotros según Su grande poder porque estamos seguros que Él sabe lo que necesitamos,y que nos dará las respuestas que tanto anhelamos en nuestro corazón.
Por lo tanto,no permitas que tu vida pase frente a tus ojos como un tren descarrilado."Encomienda a Dios tu camino y confía en Él;y Él hará"(Salmo 37:5).Dios tiene cuidado de ti.Tan solo confía.Dios te bendiga grandemente.
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