ENTRE VALLES Y MONTAÑAS

Nuestro paso por esta vida es como el caminar entre valles y desiertos.Habrá ocasiones en que la travesía puede ser llevadera;en otras ocasiones puede ser agotadora,al punto en que nos sentiremos rendidos y cansados.Caminaremos,y a nuestro paso,(así como el pueblo de Israel caminó por aquél grande desierto por cuarenta años),pasaremos por momentos donde nos tendremos que detener por causa de las pruebas y de las dificultades que enfrentaremos.Caminaremos por largas jornadas,y pasaremos por distintos lugares,y llegará el momento en que nos tengamos que detener para coger un nuevo impulso.
      Es bueno detenerse en el camino y así poder recuperar las fuerzas para seguir adelante.También es bueno hacer un recuento en lo que debimos haber hecho,o no se debió haber hecho.Prepararnos espiritual,física y mentalmente para seguir enfrentando nuevos retos.El problema está en no querer seguir adelante y rendirnos por completo.Son muchas las personas que a diario se quitan del camino,porque ya no soportan más el peso del mismo.Otros se detienen,y se conforman con lo que han logrado,y prefieren permanecer estacionados allí por el resto de sus vidas.Pero nunca debemos olvidar que la vida continua y que Dios tiene mejores planes y cosas para nosotros.
     Así mismo se lo expresó Dios a Su pueblo Israel en Deuteronomio 1:6-8.Les dijo que ya era suficiente el tiempo que ellos habían estado en aquel monte.Les dijo que ya era hora de que entraran a tomar la posesión que Él les había otorgado.Dios tiene una provisión para ti,una victoria,una bendición.Pero no puedes seguir en ese monte;metido dentro de el,y huyendo de la vida.Dios tiene grandes cosas y mejores promesas para ti.Tienes que levantarte,y dejar de lamentarte de tu dolor y de tu tristeza.Delante de ti hay una tierra prometida,y un galardón.Tiene tu nombre.Pero tienes que dejar ese monte(pasado)atrás,venir a tomar lo que por herencia Dios te dado.Así que levantate,y camina...porque Dios te ayudará hasta el final de tu jornada.Dios te bendiga.