Muchas veces en nuestras vidas esperamos que nos sucedan grandes acontecimientos o sucesos que nos impresionen de manera tal,que una vez que hayan acontecido,entonces nosotros decidamos buscar de Dios,y obedecer Su Santa Palabra.Si estamos haciendo esto,entonces nos estamos perdiendo de grandes bendiciones.De hecho,nunca seremos testigos de ningún gran suceso hasta que empecemos a obedecer al Señor,y a creerle aún en las cosas más simples y sencillas que llegan a nuestras vidas.De esto nos puede enseñar el apóstol Pedro quién en un momento dado de su vida comprendió que era mejor obedecer al Señor,que confiar tanto en sus habilidades humanas,como también en que algo sucediera;algo que lo hiciera volverse al Señor de todo corazón.
Cuando vamos al Evangelio de Lucas,en el capítulo 5,allí vamos a encontrar el relato bíblico de la pesca milagrosa que tuvo Pedro ese día.Noten el esfuerzo y el trabajo de Pedro y de sus compañeros durante la noche anterior.Estuvieron toda la noche tratando de pescar y nada hubieron pescado.Pero note también las siguientes palabras de este humilde pescador:"más en tu palabra echaré la red".Y es que Pedro reconoció que no bastaba sólo ser un buen pescador,trabajador,buen hombre,etc...El vio algo diferente en Jesús;algo diferente en Sus Palabras.Sabia que lo normal estaba fuera de aquella barca;pero lo sobrenatural estaba metido allí con ellos.Y por ello decidió creerle al Señor,y en obediencia a Su Palabra,entonces tiró la red justo donde el Señor le indicó,y...y lo sobrenatural aconteció fuera de aquella barca.Los peces eran tantos,que tuvieron que pedir ayuda a sus otros compañeros.
Aquel pequeño acto de obediencia al Señor provocó no sólo el milagro de aquella gran pesca,sino también provocó que Pedro cayera rendido a los pies de Jesús,y se convirtiera en el gran Apóstol del Señor y Salvador del mundo.Detenernos en el camino para luego esperar que algo suceda,como que no tiene sentido.Sino,preguntemosles a aquellos que han logrado llegar hasta la cima de las montañas.Si,ellas siempre han estado ahí,pero para llegar a la cumbre de cada una de ellas,entonces tenemos que escalarlas.¿Quieres bendición,un milagro o que algo extraordinario ocurra en tu vida?Entonces,creele a Dios y a Su Palabra,y actua en esa palabra que ya recibiste,y contempla como ese tu milagro comienza a suceder frente a tu vida.Veras que tan pronto actúes en obediencia a la voz de Dios,tu corazón rebosara de contentamiento por tanta grandeza divina,y serás testigo para otros de cuán grande es Dios...cuán grande es Su amor.Dios te bendiga.
miércoles, 17 de junio de 2020
SOLO LANZA LA RED
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