Muchas personas piensan que no pueden venir al Señor Jesús hasta que no reformen sus conductas.Esto va contrario a lo que establece la Palabra de Dios.El Señor Jesús no dice:Arregla primero tu vida y luego ven a Mi".Dice,más bien:Venid a Mi todos los que estáis trabajados y cargados,y Yo os haré descansar".Mateo 11:28.
Cuando tratamos de arreglar nosotros mismos nuestras vidas fracturadas,sucede algo terrible:colocamos las piezas de tal manera,que llegamos a convertir nuestras vidas en lo que pensamos que deben ser.Y nos olvidamos que esto es lo que precisamente puede ser la causa de nuestro sufrimiento.La gente muchas veces trata de ocultarle a Dios cuales sin sus piezas rotas.Y éste es un trágico error.
Entonces,que podemos hacer?No le presente a Dios,lo mejor que pueda ofrecerle.Presentele a Dios sus piezas rotas.La Palabra del Señor nos dice:Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado;al corazón contrito y humillado no despreciaras tú,oh Dios".Salmo 51:17.Permita al Señor que obre en su vida.El resultado será lo que Él nos prometió en 2 Corintios 4:17,:que nuestras piezas rotas nos producirían una gloria eterna que sobrepasara nuestro sufrimiento.Si usted no puede arreglar su vida,entonces es hora de no hacerlo con sus propias fuerzas.Las manos de Dios son más que suficientes para sanarle y restaurarlo por completo para gloria de Su Nombre.Dios les bendiga.
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